Arica-Parinacota Turismo

Durante muchos años muchos de nosotros (me incluyo) miramos con recelo todo lo que fuera u oliera a militar. Yo provengo de una familia exiliada, pero de aquellos que vivimos el exilio como aprendizaje y no como sufrimiento, aunque también los hubo. Una de las cosas que más recuerdo de haber vivido en Africa y Europa es haber compartido con gente muy diversa, personas del Africa negra, de Guinea Bisau, del Congo. En mi colegio tenía amigos de asia, europeos, de Africa, árabes, etc.

En los últimos años he tenido la oportunidad de ir conociendo a militares y de ir compartiendo y haciéndome amigo de ellos. En el último mes me pasaron dos cosas. Primero que vi la Parada Militar con mis hijos y les fui explicando lo que significaba lo que estaban viendo. Y lloré de alegría, de orgullo por el país donde vivo. Sentí que estaba reconciliado con ese mundo. Y segundo, recientemente en la Expedición Payachatas que organizamos participaron dos subtenientes del Regimiento Huamachuco, jóvenes de 22 y 23 años. Fue una gran experiencia para mí compartir codo a codo el desafío de la Expedición durante 8 días con ellos. A más de 4.000 metros de altura pudimos compartir nuestros sentimientos, anhelos y temores por el futuro de nuestro país. Gracias Marco y Sebastián por todas las conversaciones.

Y para muestra esta foto que muestra que los militares también tiene sentido del humor.